Los presidentes de Rusia y China, Vladimir Putin y Xi Jinping, se reunieron el 21 de marzo en el Kremlin en el marco de la visita de Estado del líder chino a Moscú. El encuentro se produjo en medio de la creciente tensión entre Rusia y Occidente por la posible invasión rusa a Ucrania.

La reunión duró casi cinco horas y abarcó diversos temas de interés bilateral y global, como el comercio, la energía, la cooperación estratégica, la seguridad regional y el cambio climático. Ambos mandatarios firmaron varios acuerdos, entre ellos uno para construir el gigantesco gasoducto “Fuerza de Siberia 2”, que llevará gas natural desde Siberia hasta el norte de China.

Además, Putin y Xi emitieron una declaración conjunta en la que expresaron su oposición a la expansión de la OTAN y al pacto de seguridad AUKUS entre Estados Unidos, Reino Unido y Australia. Los dos líderes acusaron a la alianza atlántica de adoptar una ideología de la Guerra Fría y señalaron que no hay áreas prohibidas de cooperación entre Rusia y China.

Sin embargo, la declaración no se refirió explícitamente a Ucrania, el asunto más candente del momento. Antes del encuentro, China había presentado una iniciativa de paz para resolver el conflicto mediante el diálogo político y el respeto a la soberanía e integridad territorial ucraniana. No obstante, Pekín también se mostró comprensivo con las preocupaciones rusas sobre su seguridad nacional.

La visita de Putin a China fue muy esperada por ambos países, que han estrechado sus relaciones en los últimos años ante las sanciones occidentales y las presiones geopolíticas. El presidente chino calificó a Putin como su mejor amigo y lo invitó a participar en la ceremonia inaugural de los Juegos Olímpicos de Invierno en Pekín.

La reunión entre Putin y Xi ha sido vista por muchos analistas como una muestra de fuerza frente a Occidente y una señal de advertencia sobre las consecuencias que tendría una intervención militar en Ucrania. Al mismo tiempo, también ha evidenciado las diferencias entre Rusia y China sobre algunos aspectos clave del conflicto ucraniano.

La reunión entre Putin y Xi podría tener un impacto significativo en el escenario global, ya que podría alterar el equilibrio de poder entre las grandes potencias e influir en el futuro del orden mundial. Asimismo, podría afectar las relaciones entre Rusia y China con otros actores regionales e internacionales involucrados o interesados en la crisis ucraniana.

Aquí hay algunas frases de los presidentes durante sus comparecencias ante los medios después de haberse reunido en el Kremlin el 21 de marzo de 2023:

• Xi: “Estoy muy contento de visitar Rusia por invitación del presidente Putin. Esta es mi primera visita al extranjero desde mi reelección y refleja la alta importancia que China otorga a las relaciones con Rusia”.
• Putin: “Hemos tenido una conversación muy sustancial y constructiva sobre una amplia gama de temas. Hemos confirmado nuestra voluntad de seguir desarrollando nuestra asociación estratégica integral en todos los ámbitos”.
• Xi: “Hemos intercambiado opiniones sobre la situación en Ucrania y hemos reiterado nuestro apoyo a una solución pacífica del conflicto mediante el diálogo y el respeto mutuo. China está dispuesta a desempeñar un papel constructivo para promover la paz y la estabilidad en la región”.
• Putin: “Hemos expresado nuestra preocupación por las acciones provocativas e irresponsables de algunos países occidentales que amenazan la seguridad y la soberanía de Rusia. Hemos acordado fortalecer nuestra coordinación y cooperación para salvaguardar nuestros intereses comunes y hacer frente a los desafíos globales”.